El color es un hecho cotidiano que nos ayuda a tener una percepción distinta de la realidad. Pero para Neil Harbisson sólo es algo que está en su imaginación. A los once años le diagnosticaron acromatopsia, es decir una visión en blanco y negro.

Ahora gracias a un ojo electrónico diseñado por Adam Montadon, puede ponerle sonido a los colores. Con un sensor colocado a la altura del ojo y conectado a una pequeña computadora que lleva en la espalda, mide las frecuencias de onda del color y las convierte en sonido. El rojo, por su longitud de onda, es una nota baja, mientras el violeta es una nota alta. El primer diseño que utilizó tení­a solo seis frecuencias distintas, ahora ha evolucionado a poder distinguir 360 colores.

Neil, además de ser conocido como el primer ciborg oficial del mundo, es un artista que ha compuesto música con colores. Su exposición en el Espai Tramar de Barcelona, muestra expresiones pictográficas de composiciones musicales de Beethoven y Mozart. Incluye, además, retratos sonoros de personajes famosos. Su último proyecto es crear un «mundo sonocromático» ofreciendo alimentos de colores acorde a la canción preferida del cliente.

«Las cien primeras notas de melodías conocidas las he pasado a color, porque el hecho de que yo escucho colores también implica que cuando escucho música relaciono las notas con los colores con las que están asociadas».

No siempre somos conscientes de la importancia que tienen los colores en nuestra vida. Al salir al espacio público recibimos bombardeos de información cromática: el color rojo del alto y el verde del siga, las lineas del metro, el color de nuestra ropa que es determinado por la moda del momento o el equipo de futbol favorito. En mercadotecnia el color de las marcas es de tal importancia que puede engañarnos entre un producto original y uno falso.

¿Qué importancia tiene el color en la evolución de las especies? Así­ como los colores vivos de las flores sirven para atraer a los insectos y que repartan el polen, los pájaros son atraídos por las frutas para después ser distribuidores de sus semillas. A su vez, los pájaros machos muestran sus plumas de colores intensos para atraer a las hembras y poder reproducirse.

Neil, a pesar de que nunca percibirá los colores de manera visual, ha utilizado la cibernética y las nuevas tecnología­s para tener una percepción más amplia del mundo. Ha creado una forma de extender sus sentidos y sus capacidades.

Agradecimiento especial: Traducción de catalán por Juan Puig